Para comenzar la dinámica del Vagón del Metro me hizo romper muchas de estas. En el primer día y para que así nos “presentásemos” hicimos esta dinámica. En ella debíamos presuponer por parejas ciertas cosas referentes al otro. Y claro te das cuenta que por la imagen de esa persona la prejuzgas una y otra vez. En más de una ocasión yo había realizado esto en el metro. Ir aburrido, observas a una persona detenidamente, y si va con alguien como interactúa con el, y la prejuzgas. Presupones que estudia o trabaja, como es, por donde vive, que edad tiene… y gran infinidad de cosas diferentes. Y lo mejor de todo es que mayormente no aciertas en una gran mayoría de las cosas y de los casos. Y este era el principal objetivo de la dinámica. Era hacernos darnos cuenta que no debemos prejuzgar al otro. Debemos esperar a conocerle si existe la oportunidad, y una vez conocido ya poder opinar.
Esta idea me lleva a entrelazarla con otra ocurrida en el día de ayer en el otro curso. En ella me di cuenta que muchas veces decimos que creemos saber cosas y simplemente las imaginamos. Debemos especificar desde que punto de vista hablamos, si desde el conocimiento o desde la imaginación. Porque en muchas ocasiones vemos gran cantidad de cosas en los medios de comunicación, en el resto de la sociedad, y por lo tanto imaginamos que en el todo es igual, pero nos equivocamos la mayoría de las veces. Debemos pararnos a conocer como son las cosas y decir claramente: “se que esto es así por…” y no que tengamos que decir “creo o imagino que es así por…”. En muchas ocasiones el principal transmisor de “imaginaciones” es la televisión. En esta vemos películas, programas, series… que nos inmiscuyen ciertas ideas, y por lo tanto las adaptamos y las hacemos nuestras sin habernos molestado en intentar contrastarlas.
Debemos luchar día tras día entre todas las personas que realizamos eso para intentar incluir esa idea al resto. Puede que al principio cueste mucho, ya que en muchas ocasiones solo somos unos pocos y no somos representativos. Pero gracias al formador del curso se me ha reforzado la idea de que en un futuro podemos ser representativos, elegidos por el resto de personas o con cierta importancia como para poder modificar cosas. Y es en este momento cuando nuestra mente debe ser fuerte y continuar defendiendo las ideas que se tenían en el pasado, en el momento en el que no eras representativo. De esta forma podremos cambiar gran cantidad de cosas.
También podemos enlazar dos cosas de los dos cursos diferentes. La definición de Animación Sociocultural y el concepto de inclusión. Nosotros como futuros animadores socioculturales debemos percatarnos que el concepto de inclusión es uno de los más importantes como objetivo. Debemos intentar incluirnos todos en una sociedad común. No debemos integrar a las minorías en las mayorías, sin que estas puedan realizar sus aportes y que la mayoría no se tenga que adaptar un poco a la minoría. Debemos hacer una conjunción. Debemos juntar la mayoría y la minoría para así poder dinamizar la sociedad, evolucionar teniendo en cuenta todo lo que puede aportar cada parte y adaptándose de forma mutua y reciproca al resto.Como conclusión entrelazaré los diferentes temas expuestos anteriormente. Pienso que entre todos los que pensamos ciertas cosas correctas como la inclusión social debemos luchar desde el primer momento en el que tenemos esas ideas. Porque en un futuro podríamos ser representativos para poder llevar a cabo mas fácilmente nuestros objetivos. Y debemos pensar que no debemos imponer nada al resto, sino también adaptarnos un poco nosotros a los demás, ya que la riqueza social esta en la diversidad de las personas. Y una de las principales barreras a eliminar desde el principio son los prejuicios hacia ciertas “clases” sociales, intentando no prestar tanta atención a lo que los medios de comunicación o la mayoría de la sociedad nos indican.
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