Vagabundeo poco a poco por las cosas que me dicen los demás, por las cosas que leo, buscando un lugar donde poder refugiarme. Buscando personas que me den cobijo afectivo pues mi mente se siente desolada, aplastada y maleada con la cantidad de insensateces que me intentan inmiscuir.
En mi cabeza se afligen las ideas, y mi mente se resiente de pensar tan deprisa. Intento descansar, y parece que no lo hubiese hecho. En mi cabeza se siguen deslizando ideas hacia mi mano. Mi mano no se resiste a aceptarlas y reflejarlas porque se siente obligada a hacerlo.
Siento algo en mi interior que me indica que algo no va bien. Busco entre el bosque de mis ideas, pero es demasiado frondoso por lo que no logro ver que es. Intento agilizar mi mente con el bolígrafo para ver si así consigo podar los árboles que me nublan la vista.
Al fin he encontrado que es lo que me martiriza. El sentimiento que en este instante esta realizando un tour por toda mi mente es la nostalgia. Siento nostalgia de no poder sentir. Parece absurda esta contradicción, pero si no me contradijese a mi mismo no estaría escribiendo estas líneas.
Poco a poco voy descubriendo que sentimientos no siento. Amor, cariño, felicidad, alegría y un largo listado. Si ya se que todos intentamos buscar estos y son muy difíciles de conseguir. Pero puedo afirmar que no. Porque ciertos momentos que están ocurriendo me dejan entrever que mucha gente que lucha los consigue. Sobre todo personas que aprecio. Y vuelve otra contradicción, porque me siento alegre porque estas personas hayan conseguido lo que yo no consigo alcanzar. Tengo 19 años y se lo que es amar a una chica, querer de una forma especial, pero no se como se siente cuando se es correspondido. Por ello tengo miedo de que me vuelva a ocurrir. Es decir, tengo miedo al amor pero añoro todo lo que me reportaba estar en esa situación.
Sigo escribiendo y sigo contradiciéndome. Esto me mata, pero me da la vida. Porque intento luchar por vencerlas. Soy como un gladiador que se enfrenta a una manada de tigres solo con las palabras. Soy un ser antisocial que intenta adentrarse en ella porque se da cuenta que sin ella no puede vivir.
Miro el reloj y me doy cuenta que sin querer ya han pasado mas de 20 minutos. Me encuentro motivado. No se porque, pero siento que lo estoy. Creo que esta es una de las pocas cosas que tengo completamente clara en toda la noche.
Pienso en lo que me ha deparado el día y me doy cuenta que hoy ha sido otro día mas, Sin nada interesante, ni nada aprendido. Entonces me pregunto ¿para que vivir el día a día si este no reporta nada? Justamente en la pregunta acabo de encontrar la respuesta. Tenemos que vivir al día porque nunca sabemos que pasara mañana. Porque el pasado esta en tus pies, el futuro en tu cabeza y el presente en tus manos. Esta es la frase que podría dar respuesta a la pregunta y deberíamos tomarlo como un buen principio moral para continuar viviendo.
Me quedo bloqueado e intento que la tinta derrame sin querer cosas bellas. Cosas que sigan saliendo. El mero hecho de escribir que me bloqueo ya me desbloquea. Veo en mi alguien ambicioso, que codicia demasiadas cosas y se siente insatisfecho. Quizá por esto me trate mucha gente como un loco. Quizá también por insatisfacción y por querer intentar descubrir muchas cosas, la curiosidad me llama a observar y aprender de cualquier cosa o momento. Quizá parezca un prepotente cuando cuento cosas “absurdas” para muchos oídos, pero simplemente busco encontrar a alguien como yo e intentar reactivar en la gente la virtud de la curiosidad en su justa medida. Pero no consigo los objetivos, pero sigo luchando a pesar de tropezar una y otra vez. Las personas simplemente aprenden lo que les conviene. Porque siempre sabemos lo que creemos que nos conviene saber, y no nos percatamos que todos los aprendizajes en el presente son valederos para un posible futuro.Han pasado otros veinte minutos. Son las 03:24 y mi mente se ha terminado de bloquear, por lo que intentare seguir vagabundeando en otro momento.
